Un proyecto de ley considerado como la legislación más amplia y severa hasta el momento para enfrentar la crisis en Venezuela y restaurar la democracia en ese país fue aprobado este miércoles por el comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos.

El proyecto Ley de Ayuda de Emergencia, Asistencia para la Democracia y Desarrollo de Venezuela (VERDAD) es liderado por los senadores Bob Menéndez, demócrata por Nueva Jersey, y Marco Rubio, republicano de Florida, que lo presentaron junto a otros congresistas en abril pasado.

“El comité de Relaciones Exteriores del Senado está enviando un mensaje bipartidista de apoyo al pueblo de Venezuela al aprobar la Ley VERDAD. El camino de Venezuela hacia la restauración del estado de derecho y del orden democrático exigirán un esfuerzo significativo por parte de los Estados Unidos, nuestros aliados regionales y de la comunidad internacional”, dijo Rubio en un comunicado.

El senador aseguró que su país continuará proporcionando la asistencia humanitaria “que tanto se necesita y ayudará a coordinar los esfuerzos para una Venezuela post-Maduro“.

Menéndez, a su vez, calificó la aprobación del proyecto como un paso trascendental de Estados Unidos para apoyar a los venezolanos “en este oscuro y difícil capítulo de su lucha por recuperar a su país del régimen de Nicolás Maduro y restaurar un proceso democrático”.

“A través de este esfuerzo bipartidista basado en objetivos compartidos y una diplomacia vigorosa y de principios, estamos estableciendo la estructura para que la administración Trump fortalezca el movimiento democrático en crecimiento de Venezuela”, dijo el senador.

Entre las medidas que incluye VERDAD destacan $400 millones en ayuda humanitaria, revocar las visas de los familiares de funcionarios sancionados del régimen chavista, sancionar el endeudamiento indebido del régimen de Nicolás Maduro y el comercio del oro y coordinar sanciones internacionales, en especial con gobiernos de países latinoamericanos y europeos.

El proyecto de ley también amplía las herramientas actuales para abordar la cleptocracia, reconoce y apoya formalmente los esfuerzos del presidente interino Juan Guaidó para restaurar la democracia y acelera la planificación con instituciones financieras internacionales para avanzar en la reconstrucción de Venezuela posterior a Maduro.