La inflación acumulada en Venezuela hasta julio de este año alcanzó el 249%, afirmó el Parlamento venezolano, de mayoría opositora, que durante todo 2017 se ha encargado de informar sobre este dato en ausencia de la información del Banco Central (BCV).

“Tenemos una inflación acumulada en lo que va de año del 249%, eso es lo que está pasando en Venezuela el día de hoy. No hay aumento de salario que pueda cubrir esta situación”, dijo el diputado Rafael Guzmándurante una sesión del Legislativo, en la que también detalló que la inflación de julio fue del 26%.

Debido a que el BCV lleva más de un año sin publicar la inflación ni otros indicadores del país, la Asamblea Nacional venezolana (Parlamento) decidió en enero pasado informar el índice de precios al consumidorpara así ofrecer mensualmente datos sobre la inflación, explicó entonces el Parlamento a través de un informe.

“Para ello se definió una canasta de bienes y servicios representativadel consumo del venezolano, de acuerdo con a la información suministrada por la IV Encuesta de Presupuestos familiares realizada por el INE (Instituto Nacional de Estadísticas)”, dice el informe.

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A esa canasta “se le asignaron unos pesos relativos” de acuerdo con la “importancia en el presupuesto familiar, y luego los precios de los bienes y servicios de esa cesta son objeto de seguimiento a través de una Encuesta de Precios”.

La inflación en Venezuela, que según el BCV cerró 2015 en 180,9%, es considerada por el régimen de Nicolás Maduro como un problema inducido por una “guerra económica”, de la que culpan a empresarios y opositores y a la que achacan la grave crisis que atraviesa la nación petrolera.

El Banco Central ha guardado silencio desde 2016 acerca de las cifras oficiales de inflación, producto interior bruto (PIB) y escasez en el país caribeño.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha pronosticado que la inflación seguirá desbocada y prevé que se ubique en 720 por ciento para este año y hasta un 2.000 por ciento en 2018.