Como ya se ha venido evidenciando, la reconversión monetaria anunciada por el presidente de Venezuela Nicolás Maduro, ya ha sido objeto de prórroga por dos meses.
Según fuentes cercanas, la reconversión sufrirá un nuevo plazo para introducir el nuevo cono monetario que inicialmente arrancaría el 4 de junio, y que luego la fecha se movió para el 4 de agosto como plazo insuficiente otorgado para hacer los cambios pertinentes en todas las plataformas y sistemas de la banca, de acuerdo a la solicitud hecha por la Asobancaria.
La Asociación Bancaria de Venezuela pidió 90 días de plazo, pero el jefe de estado concedió solo 60 días, para ahora tener que considerar otra fecha, esta vez prevista el 18 de agosto.
Extrañamente, el tema reconversión monetaria desapareció de las declaraciones oficiales e incluso, a la campaña que difundía el gobierno se le bajó su intensidad cuando debía ser todo lo contrario a menos de un mes para el 4 de agosto.
Las entidades financieras siguen trabajando en los procesos de adecuación que están bastante adelantados, pero una vez más, hay que hacer pruebas técnicas con el papel moneda en los cajeros automáticos.
Por su parte, desde el Banco Central de Venezuela se asegura que en sus bóvedas se encuentran lotes de los nuevos billetes, sin embargo, a la banca aún no llega la primera pieza.
De acuerdo con el diputado y ex gerente de Investigaciones Económica del BCV, José Guerra, se elevó al ente emisor la posible propuesta de eliminar seis y no tres ceros al bolívar como prevé el decreto de reconversión publicado en la Gaceta Oficial 41.366 del 22 de marzo.
Guerra también declaró este martes a Unión Radio, que con un nuevo decreto se indicaría que a la moneda se le restarían seis ceros. Es la manera de que la familia de papel moneda que se ordenó imprimir en Suecia e Inglaterra, no pierda su valor tan rápido apenas “toque el puerto de La Guaira”, dijo a César Miguel Rondón.
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