La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) estimo que en el año 2018 la economía venezolana se contraerá por quinto año consecutivo, por lo cual registra una caida de un doce por ciento, con lo que encadena cinco años de retroceso.

El organismo no presenta una proyección de inflación, pero señala que la comisión prevé que “en 2018 la inflación registra una nueva aceleración y según diversas estimaciones al cierre del año la tasa de inflación de Venezuela podría ser de cinco o más dígitos. Esta dinámica de la inflación ha dado lugar a nuevas alzas en el salario mínimo”.

“Para el 2018 la Cepal proyecta una caída del 12% del PIB de la República Bolivariana de Venezuela, lo que supone cinco años consecutivos de contracción y una caída acumulada que supera el 40% respecto al nivel exhibido en el 2013“, destacó el informe regional presentado por la secretaria ejecutiva del organismo, Alicia Bárcena, en México.
En cuanto a América Latina y el Caribe, la Cepal prevé que este año la economía se expandirá 1,5%, un recorte del 0,7 desde el 2,2% previsto anteriormente, en medio de un contexto internacional “marcado por la incertidumbre y la volatilidad”. Igualmente, consideró que la “la producción de crudo sigue disminuyendo y para 2018 se estima una caída de la producción aun mayor que la del 2017”, aunque “el precio de la canasta de crudo venezolana sigue recuperándose y en los primeros seis meses del 2018 se ha incrementado respecto al cierre de 2017”.

De igual forma, destacó el informe que “sectores como el transporte han sido afectados por problemas en el suministro de repuestos y combustible, mientras que los cortes en el suministro de electricidad afectan la producción y el comercio en general”.

La Cepal identifica algunos desafíos para la consolidación del crecimiento global en el mediano plazo, como la reversión de las políticas de expansión cuantitativa que han venido implementando, o anunciando, la Reserva Federal de los Estados Unidos, el Banco Central Europeo y el Banco del Japón.