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A tan solo días de que se cumpla la última prórroga impuesta por el Estado para la salida del billete de 100 bolívares, varios comentarios han empezado a cobrar fuerza en las calles y redes sociales. Los ciudadanos cada vez más expresan su confusión ante el destino que tendrían estas piezas.

El exministro de Industrias, Víctor Álvarez, comentó al diario Panorama que, en su opinión, el billete estará vigente para Semana Santa o incluso durante un mayor lapso de tiempo al anunciado por el mandatario. De igual forma, el economista Jesús Casique expresó que, según datos del Banco Central de Venezuela (BCV), esta pieza seguiría siendo clave para la economía nacional, ya que en enero circularon más de 13 millones de billetes de los que un 54% (6.3 millones) habría correspondido a piezas de 100 bolívares.

Asimismo, Henkel García indicó que han llegado nuevas piezas del que una vez fue calificado como “el moribundo” billete de 100 bolívares, lo que a juicio del analista y director de Econométrica refleja la posibilidad de que este papel moneda siga en curso legal.

La medida, que en un inicio había sido promovida por el Gobierno de Nicolás Maduro como una medida para “combatir las mafias especulativas”, se llevó tres Gacetas Oficiales y podría estar a las puertas de una cuarta prórroga. Por su parte, el mandatario culpó a una supuesta “guerra económica” y sabotaje desde el exterior para impedir la llegada del papel moneda del nuevo cono.

Sobre este punto, muchos transportistas han tomado sus previsiones y colocaron avisos en los que informan que no estarán recibiendo billetes de 100 bolívares. “No queremos que nos pase lo mismo que en diciembre”, fueron las palabras que uno de los conductores expresó al medio.

En contraste, algunos comerciantes no se muestran preocupados por la posible salida del papel moneda, y aseguraron que seguirán recibiendo estas piezas hasta que las autoridades indiquen lo contrario.

De igual manera, el economista, diputado y profesor universitario, José Guerra, aseguró que una medida tan importante, como la implementación de un nuevo cono monetario, necesitaría de una prórroga indefinida para que los ciudadanos puedan adaptarse de forma menos traumática.

[Vía: Caraota Digital]