La Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM), es un organismo que en los últimos años se ha convertido en un bastión que sirve de sostén a la Revolución. Se trata de un órgano represor, que bajo la conducción del M/G. Iván Hernández Dala, ha logrado neutralizar a un grupo de políticos opositores y militares institucionalistas que han sido tildados de «escuálidos» por su firme posición en contra de la participación de oficiales cubanos en el diseño y revisión de los planes de defensa de la Nación, por haber censurado el empleo perverso, brutal y desmedido de las unidades de la Guardia Nacional en el restablecimiento del Orden Público durante las manifestaciones pacíficas del año 2017 y por haber expresado su desacuerdo con el empleo de grupos armados anárquicos (colectivos/presos que son sacados de los Centros Penitenciarios) en la defensa del régimen dictatorial de Nicolás Maduro.

Para neutralizar a estos incómodos adversarios, la DGCIM, ha realizado una férrea y permanente persecución política, que ha terminado con detenciones ilegales (privaciones ilegítimas), allanamientos sin orden de la autoridad correspondiente, secuestros, desapariciones forzosas, extorsiones y el hurto/robo de las pertenencias (vehículos, prendas, dinero, armas, equipos de computación, artefactos eléctricos, entre otros). Este trabajo sucio e ilegal es realizado por la División de Asuntos Especiales (DAE) que pertenece a la DGCIM y está bajo la dirección del May. Alexander Gramko Arteaga.

Los integrantes de esta división, se reparten las ganancias que genera la venta de los bienes y efectos que sustraen en los allanamientos ilegales y, que posteriormente, son vendidos en el mercado negro. El administrador de este mercado negro es el Cap. Germán Antonio Sánchez, alias «Santiago», quien junto al Cap. Jesús Cárdenas, tienen que distribuir el dinero sucio entre los testigos falsos que promueven, para sembrar falsos positivos e incriminar a militares y civiles inocentes. Los funcionarios actuantes de la DAE y los integrantes de la DGCIM paralela, conformada por un grupo de civiles que no son funcionarios, pero son los hombres que contribuyen con el trabajo sucio incriminar que realiza la DGCIM a través de la DAE.

Esos civiles que no son funcionarios, operan de manera clandestina, y son dirigidos por un peligroso delincuente llamado Jonathan Pérez Noguera, alias «Jota Jota», quien junto a Enderson Ríos, dirigen a este grupo clandestino integrado por delincuentes y colectivos armados que utilizan como fachada una empresa de escoltas privados para cometer sus fechorías, las cuales son ordenadas por el May. Alexander Gramko Arteaga.

Muchas veces, estos escoltas son contratados por personas que requieren sus servicios y meses más tarde resultan víctimas de estos delincuentes que trabajan con la DGCIM, el negocio es redondo.

La situación se torna más grave debido a que esta organización delictiva cuenta dentro de su estructura con dos fiscales del Ministerio Público, que se llaman Ángel Betancourt y Farid Mora en la jurisdicción ordinaria, y Manuel Echenique para los casos que se ventilan en la jurisdicción militar. Angel Bentancourt tiene además, una relación de compadrazgo con el Cap. Germán Antonio Sánchez, alias «Santiago» y con el Cap. Jesús Cárdenas; tanto Ángel Betancourt como Farid Mora tienen una oficina que han habilitado en la sede de la DGCIM, en la cual planifican y ordenan todas las atrocidades en contra de civiles y militares a quienes consideran enemigos de la revolución.

Para la ejecución de los tratos crueles e inhumanos y la aplicación de sustancias narcóticas que suprimen la voluntad de los detenidos, los funcionarios de la DGCIM utilizan algunas viviendas que han sido incautadas al Narcotráfico y asignadas a la DGCIM por órdenes del M/G. Néstor Reverol Torres; estás viviendas son llamadas «casas de tortura», siendo una de las más comunes, la que también utiliza alias «Jota Jota» cómo centro de operaciones, ubicada en la Av. José Manuel Sanz a pocos metros de Crema Paraíso de San Bernardino. Cada quien tiene una función en la organización delictiva que opera a la sombra de la revolución, el grupo que dirige y ejecuta las torturas está integrado por los siguientes:

1-. Cnel. Rafael Franco Quintero
2-. Cnel. Hannover Guerrero
3-. May. Alexander Gramko Arteaga
4-. May. Néstor Blanco Hurtado, alias «Ezequiel»
5-. May. José Sánchez Castro
6-. Cap. Germán Antonio Sánchez, alias «Santiago»
7-. Cap. José Castillo, alias «Talibán»
8-. Cap. Jesús Cárdenas, alias «Camaleón»
9-. Cap. Jonathan Becerra, alias «Piraña»
10-.Cap. Kelyer Chacón Bautista, alias «Gaviota»
11-. TN. Abel Angola
12-. Tte. Johana González, alias «Nani»
13-. Tte. Isaac Estevez, alias «Chino»
14-. Tte. Reunirte Amaro, alias «Reverendo»
15-. Tte. Saúl Méndez Calderon