Estados Unidos explora la posibilidad de aplicar sanciones a la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), que podrían incluir una suspensión temporal de las importaciones de crudo, como parte de un abanico de opciones que estudia para aumentar la presión sobre el régimen de Nicolás Maduro, confirmaron fuentes cercanas a la situación.

“Se está considerando seriamente”, dijo una de las fuentes, que habló a condición de no ser identificada, sobre las posibles sanciones a PDVSA, noticia divulgada inicialmente por la agencia Reuters.

“Se llegó a la convicción, en la Casa Blanca, de que con Maduro no se puede tratar por las buenas y están preparándose para pasar a una fase de mayor presión, incluyendo más sanciones individuales [contra funcionarios del chavismo implicados en violaciones a los derechos humanos] y sanciones al crudo venezolano”, agregó la fuente.

Las medidas están siendo consideradas en momentos en que el régimen bolivariano de Caracas es acusado de organizar fraudulentamente una Asamblea Constituyente que terminaría por cimentar un régimen comunista en el país petrolero, aunque el 90 por ciento de la población rechaza la propuesta.

El gobierno estadounidense ya había aplicado sanciones individuales contra figuras del chavismo implicados en actos de corrupción y violaciones de los derechos humanos, congelando sus cuentas bancarias y suspendiendo sus visas de ingreso a Estados Unidos.

Pero Washington está considerando medidas mucho más severas para afectar directamente las finanzas del régimen bolivariano.

Según el cable de Reuters, las sanciones contra PDVSA se discuten como parte de un paquete “sectorial” de sanciones que podrían impactar por primera vez la industria energética del país.

No obstante, las discusiones internas sobre la posible aplicación de sanciones es un proceso que está avanzando con mucha cautela, ante el temor de que la medida podría profundizar la ya grave crisis económica del país, reportó la agencia de noticias.

Las fuentes de el Nuevo Herald dijeron que otro de los factores que se estudian es el impacto que la medida podría tener sobre los precios del petróleo y el posible impacto que tendría sobre las refinerías estadounidenses, que importan gran parte de los 700,000 barriles diarios que provienen de Venezuela.

Una de las medidas que se están evaluando contempla el uso de las Reservas Estratégicas de Petróleo para cubrir inicialmente el impacto sobre las refinerías estadounidenses que actualmente importan crudo venezolano.

El gobierno del presidente Donald Trump ya había anunciado previamente que estaba dispuesto a vender la mitad de los casi 700 millones de barriles almacenados de la Reserva Estratégica de Petróleo.

Roger Noriega, ex subsecretario de Asuntos Hemisféricos, opinó que la eventual suspensión de las importaciones de crudo venezolano podría venir al final de una serie de medidas contundentes a ser aplicadas escalonadamente.

“[La suspensión de las importaciones] podría ser una de las medidas finales que ellos van a querer tomar, pero mientras tanto hay otros pasos significativos que podrían adoptar que serían más cercanos a un disparo de rifle que un disparo de escopeta, como lo sería la suspensión de las importaciones de crudo”, explicó Noriega.

“Primero, yo recomendaría la aplicación de sanciones directas contra funcionarios en la cúspide del régimen, quienes están impartiendo instrucciones a sus matones para que asesinen a los manifestantes”, explicó el diplomático.

Más de 60 personas han muerto y cientos han resultado lesionados en medio de la feroz represión emprendida por el régimen contra las masivas manifestaciones de protestas organizadas por la oposición para manifestar lo que ha sido llamado un golpe de Estado continuado en Venezuela.

[Vía: El Nuevo Herald]