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El gobernador del venezolano estado Táchira (oeste, fronterizo con Colombia), José Gregorio Vielma Mora, acusó hoy al Gobierno Colombiano de “invisibilizar” a decenas de familias que supuestamente se han desplazado a Venezuela por la violencia de grupos armados colombianos.

“¿Cómo puede invisibilizar Colombia este hecho? Cuando ACNUR y la Cruz Roja estuvieron en el sitio, ¿Por qué lo niegan? (…) son familias que dejaron todo, sus enseres, ganado, casas, y se vienen a otro país con una mano adelante y la otra atrás para salvarse”, dijo el gobernador chavista en una declaración a la prensa.

Criticó que no haya un pronunciamiento del Ministerio de Exteriores colombiano reconociendo el desplazamiento del grupo de colombianos hacia el país petrolero, ni tampoco del despacho de Interior.

Indicó que se encargará de hacer público lo que sucede en el límite entre ambos países y que atenderán la situación de los ciudadanos colombianos.

Por su parte, el director de Política de la gobernación del estado Táchira, Luis Díaz, señaló que la intención no es entrometerse en asuntos internos del territorio colombiano, pero, dijo, “estamos hablando de una situación que afecta directamente la frontera colombo-venezolana”.

La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) denunció el pasado viernes que 96 familias colombianas se vieron obligadas a abandonar sus hogares en los municipios de Teorama y Tibú, en el departamento de Norte de Santander, por presiones de grupos paramilitares.

Sin embargo, la ministra de relaciones Exteriores de Colombia, María Ángela Holguín, aseguró ese mismo día que el Gobierno colombiano no tiene constancia de que un grupo de ciudadanos se haya visto obligado a abandonar sus hogares y huir a Venezuela.

La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), en cooperación con la red nacional de protección del Gobierno de Nicolás Maduro, aseguró hace una semana que asiste a las personas afectadas que se encuentran en tres comunidades del sector venezolano “El Cruce”, en la frontera venezolana.

“Estas personas, que arribaron su mayoría por el río Catatumbo, afirman temores de persecución y amenazas de presuntos grupos armados ilegales que pretendían ingresar a la zona tras el proceso de desmovilización de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), lo cual aún debe ser verificado por la Misión de la ONU en Colombia”, informó en un comunicado ACNUR.

Aunque no precisó el total de desplazados, la agencia de la ONU aseguró que hasta la fecha había conversado con alrededor de 200 campesinos.

[Vía: Noticias Terra]