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La tarifa de la gasolina que por litro saldrían en $1.600 pesos Colombianos, dispararía el contrabando si el gobierno de Nicolás Maduro no habilita el paso vehicular por la frontera.

Tras conocerse la variación del precio -$1.600 por litro- de la gasolina venezolana, los gremios de Cúcuta solicitaron la inmediata normalización del tránsito a través de los tres pasos binacionales de Norte de Santander que, desde la reapertura acordada por los gobiernos de Colombia y Venezuela, siguen bloqueadas por fuertes restricciones que reprimen el intercambio comercial y el paso de personas.

Esta solicitud fue elevada por los gremios de la ciudad fronteriza para revisar qué incidencias podría generar en la economía cucuteña esta nueva tabla de tarifas intencionales del combustible venezolano.

“Estamos esperando a que se normalice el tránsito vehicular, de personas y de carga (…) Hasta tanto esto no se dé, no podríamos hablar ni de nuevas tarifas, ni de precios, pues si el paso de carro está cerrado, estamos hablando de ciencia ficción”, aseveró Carlos Luna, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Cúcuta.

 Para sectores de la economía como el de las estaciones de servicio no descartó que el sistema de oferta venezolano estimule el contrabando de la frontera, pues al facilitar la compra a través de la moneda colombiana, podría fortalecer un negocio ilegal de gasolina, con una estructura capaz de expardir sus raíces a otras zonas del Catatumbo, e incluso, al interior del país.

“Me preocupa que si en este mercado internacional de combustible no se establezca un control adecuado, puede desatar un contrabando peor al que había”, expresó María Eugenia Martínez, representante de la Asociación de Estaciones de Servicio de Norte de Santander (Asesnort).

Como consecuencia, esta situación se podría tonar adversa frente al posible escenario que auguró el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, cuando adoptó esta medida para “luchar contra las mafias colombianas” que negocian con el combustible de su país a bajísimos precios, según él, para revenderlo con mejores ganancias en Colombia.

Según Martínez, con las tarifas de la gasolina venezolana se estaría vendiendo el galón a un valor que bordean los 5.000 pesos, un importe inferior frente al costo de la gasolina que se comercializa en Cúcuta y que sufrió alzas a raíz de la nueva Reforma Tributaria.

La diferencia entre estos valores también podría desacelerar la venta del hidrocarburo en la ciudad fronteriza, lo que afectaría en primer orden la recaudación del impuesto de sobretasa, un recaudado destinado para inversiones en el departamento.

 [Vía: El Tiempo]