El presidente venezolano, Nicolás Maduro, señaló otra vez a “la mano imperialista” del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de estar detrás de las protestas contra su Gobierno.

Previamente, el gobernante venezolano denunció que “Donald Trump tiene sus manos infectadas y metidas a fondo en esta conspiración”.

Tras 51 días de conflicto social, Maduro llamó a una “gran jornada de amor” y denunció, con vídeos de manifestaciones y de protestas contra presuntos chavistas en el exterior, la “agresión fascista” de la oposición, que cifró en 120 los heridos por la represión de las marchas en Caracas y sus zonas aledañas.

“Esta agresión tiene como objetivo tomar el control político en Venezuela, recolonizar a Venezuela”, añadió en su programa “Domingos con Maduro”, que fue transmitido por un canal de televisión estatal.

El sábado Alejandro Aguilar, un joven de 23 años, murió al recibir un disparo en el pecho durante una protesta en el municipio de Varela (estado de Trujillo). De acuerdo con el alcalde de la localidad, los responsables de la muerte serían grupos paramilitares.

Por su parte Henrique Capriles aseguró que, aunque hay ONG que registran “más de 50 venezolanos asesinados”, hasta la fecha “el Ministerio Público habla de 48 personas asesinadas”.

Maduro, eligió como locación para transmitir su programa, el Metro de Caracas, donde se ubicó en el rol de conductor. Instó a la Fiscalía, a la Defensoría del Pueblo y al Poder Judicial a sumar esfuerzos para condenar y hacer justicia ante la “violencia” y “persecución” de sus opositores.

[Vía: HSB]