Venezuela exportó $1.030 millones en oro a Emiratos Árabes Unidos después de años de casi ningún intercambio comercial entre los dos países, según muestra cifras de Naciones Unidas, reseñadas por Redd Latam.

La operación se ejecutó en diciembre de 2017, de acuerdo con los datos de comercio exterior más recientes publicados por la ONU.

Las reservas internacionales en oro de un gobierno o banco central, conocidas como oro monetario, no se muestran en este tipo de estadísticas comerciales, dijo Jan Nieuwenhuijs, un analista independiente que monitorea el sector, a Redd Latam.

Nieuwenhuijs detalla que la mayor parte del metal en los envíos era de muy alto grado. En tanto, la ONU revela las cifras en kilogramos y en dólares. Los datos indican que la exportación identificada como metal “en bruto” comprendió 2,65 toneladas con un valor promedio de $39.195 el kilo.

Las tenencias oficiales de oro de un país pueden se opacas, pero el Consejo Mundial del Oro, indica que las reservas Venezolanas han disminuido 201,5 toneladas desde 2013.

Redd Latam señala que Venezuela ha enviado 21,6 toneladas de oro este año a Turquía, con un valor de $833,8 millones, según cifras de la ONU. Ese oro era relativamente refinado y probablemente vino de minas, en lugar de
ser barras de oro de alta pureza.

Este jueves Estados Unidos emitió una orden ejecutiva con la que busca bloquear operaciones del gobierno de Nicolás Maduro con el oro, pues considera que su extracción no respeta las normas ambientales y que los ingresos son fuente de corrupción.

Una fuente le dijo a Redd Latam que el Banco Central vende el oro de la minería local en el extranjero.

Nieuwenhuijs asegura que Emiratos Árabes Unidos tiene una reputación como un lugar para vender oro producido ilegalmente, especialmente de África. Cuenta con instalaciones que no certificadas por la London Bullion Market Association, y no hacer cumplir cadena de integridad.

La semana pasada el secretario asistente del Tesoro estadounidense, Marshall Billingslea, dijo el oro “se está sacando del país sin que haya contabilidad alguna para saber adónde van a parar los fondos”.

Billingslea denunció el expolio de las minas de oro en el sur de Venezuela y aseguró que “se está aproximando a una situación similar a la de los diamantes ensangrentados” en África: “Deberíamos expresar más indignación por el daño que se está causando al medioambiente y las poblaciones indígenas”, dijo.

Datos del Banco Central de Venezuela, indican que hasta mayo (último dato disponible) ese organismo había comprado 8,6 toneladas de oro en el mercado local, por el que pagó BsS 1.263 millones.

El mes pasado el gobierno de Maduro reconoció la presencia de actividad minera ilegal en áreas protegidas y prometió tomar acciones para enfrentarla.

Fuente: Banca y Negocios