El presidente de Rusia, Vladimir Putin, y su homólogo boliviano, Evo Morales, rechazaron la injerencia en los asuntos de Venezuela, al tiempo que confiaron en el éxito del diálogo entre el régimen de Nicolás Maduro y la oposición, iniciado con la mediación de Noruega.

Rusia ha subrayado en más de una ocasión que la injerencia externa en los asuntos de Venezuela es inaceptable. El señor Morales comparte esa postura, afirmó Putin tras reunirse con su homólogo boliviano.

La crisis en Venezuela fue uno de los temas abordados durante la reunión con Morales y ambos coincidieron en su valoración de la situación.

Esperamos que en el marco de las negociaciones entre el Gobierno venezolano y la oposición, que comenzaron con la mediación de Noruega, se hallen soluciones aceptables para todos los venezolanos, dijo el mandatario ruso.

La afinidad de posturas de ambos líderes también quedó de manifiesto durante la discusión de otros temas de la actualidad internacional, indicó Putin.

El presidente ruso recalcó que Moscú y La Paz siempre han abogado por el respeto de la soberanía de los pueblos, la inadmisibilidad del uso de la fuerza y de las sanciones unilaterales.

Por su parte Morales, quien visita Rusia por segunda vez en poco más de un año, se declaró muy admirador del presidente ruso, quien, dijo, lidera la lucha por el respeto del derecho internacional.

No puede haber posiciones unilaterales, imposiciones, intervenciones y los presidentes, tal vez muy pocos luchamos por la soberanía e independencia de nuestros estados, por la dignidad y la identidad de nuestros pueblos, aseveró el mandatario boliviano.

Al término de la reunión en el Kremlin, ambos mandatarios firmaron una declaración conjunta sobre el fortalecimiento de su coordinación en los asuntos internacionales.

Ambos líderes analizaron la cooperación en el aspecto humanitario y de las inversiones, así como temas regionales e internacionales, según adelantó el Kremlin.

En vísperas de la visita de Morales, el canciller boliviano, Diego Pary, señaló que el Gobierno de su país tenía especial interés en fortalecer sus relaciones con Rusia en el ámbito de la energía.

Los contactos militares también fueron uno de los temas de discusión entre los dos dirigentes. Se firmaron importantes acuerdos en el sector de los hidrocarburos y se acordó ampliar la cooperación militar.

Durante su estancia en Moscú, el presidente boliviano además fue investido doctor honoris causa por la Universidad de la Amistad de los Pueblos.