La falta de agua en diferentes zonas del país, se ha convertido en un problema recurrente, causado porque el Estado ha abandonado las inversiones necesarias para mejorar la infraestructura que permitiría garantizar el suministro de agua, esto debido al aumentos de corrupción en el país.

Pimpinas y pipotes. Eso es lo que usan los trabajadores del Hospital Universitario de Caracas (HUC), uno de los principales centros de salud en el país, para llevar el agua a los distintos pisos. Desde hace cinco días el servicio está suspendido en el nosocomio y ni siquiera en cisternas llega el líquido para abastecer los tanques.

“No tenemos agua en el hospital. Esto ha hecho que nos paralicemos porque se interrumpen los planes quirúrgicos y las consultas. No se puede operar y los pacientes y trabajadores tienen que usar los pocos baños que hay”, denunció Denis Guédez, delegado del Sindicato de Hospitales y Clínicas.

El pasado martes, 17 de abril, los trabajadores de la salud protestaron a las puertas del Clínico Universitario para exigir la dotación de insumos y el pago de sueldos dignos. En medio de la manifestación, los galenos también denunciaron que para ese momento no había agua “ni para lavarse las manos”.

El servicio fue restablecido al día siguiente, pero quedó interrumpido nuevamente el viernes 20 de abril. Desde entonces, hasta este martes 24 de abril, no ha salido ni una gota de las tuberías del Clínico Universitario.

“Las camareras no tienen agua para limpiar las incubadoras del retén de niños ni tampoco hay cómo atender a las parturientas. Con pimpinas suben el agua para los baños por las escaleras”, dijo el delegado sindical.

Añadió que las autoridades no han traído cisternas para abastecer los tanques de agua del hospital y poder “aliviar un poco la situación”.

Fuente: Noticias Venezuela